Precio, mantenimiento y posibilidad de personalizar son lo primero que pensamos al decidir comprar una vivienda. Las casas prefabricadas presentan facilidades en los tres aspectos, por lo cual se han convertido en opciones muy atractivas en el mercado. Al ser construidas en fábrica y de fácil ensamblaje, sus costos tienden a ser menores y los propietarios pueden participar en su diseño.
Las casas prefabricadas, en un principio, no tuvieron la mejor aceptación por parte del colectivo. Ahora, gozan de gran popularidad, pues representan una alternativa para aquellos que se inician en la independencia y quieren su propio techo.
¿Qué debemos tener en cuenta al adquirir una casa prefabricada?
Si tenemos planes de adquirir una casa de este tipo, debemos tomar en consideración cuatro puntos básicos que resultan fundamentales:
Calidad
Una de las razones por la cual las casas prefabricadas han tenido ciertos detractores es la creencia de que son de mala calidad. De hecho, hay personas que optan por esta alternativa sin estar del todo convencidas por la misma razón.
La realidad es que las casas prefabricadas están elaboradas con materiales de alta calidad. Por otra parte, su diseño guarda relación directa con el tipo de clima que impere en la zona en la cual se implante la casa.
Precio
Popularmente, se maneja la matriz de opinión de que las casas prefabricadas son más económicas que las tradicionales. Sus precios solo fluctúan con base en los materiales de construcción. Evidentemente, si queremos una casa elaborada con material de excelente calidad, debemos estar conscientes de que el precio será más alto. Si, por el contrario, queremos algo más económico, entonces nuestra vivienda será más sencilla.
De igual manera, el diseño también ejerce un papel importante en el precio de la casa. A mayor cantidad de detalles, mayor trabajo de construcción y, por consiguiente, el costo será más alto.
Tiempo de construcción
Las casas prefabricadas se construyen en un lapso considerablemente menor al de las casas tradicionales. Una casa tradicional tarda entre uno o dos años en ser construida, mientras la construcción de una casa prefabricada demora entre cuatro y seis meses. Por este motivo, muchas personas que buscan un inmueble para mudarse pronto optan por este tipo de viviendas. El tiempo es un factor que los posibles compradores no pueden pasar por alto.
Relación con el medio ambiente
En la actualidad, las casas prefabricadas deben parte de su popularidad al hecho de que son más ecológicas. La popularidad también radica en el hecho de que su nivel de consumo de energía es mucho menor al de una casa tradicional.
Hoy en día, los diseños de casas prefabricadas que salen al mercado están elaborados con base en diferentes avances y procesos tecnológicos. Los mismos se focalizan en la disminución del consumo de energía.
Por otra parte, los materiales utilizados en la construcción de las casas prefabricadas tienden a ser ecológicos. De esta manera y, junto al ahorro de energía, ejercen un menor impacto en el ambiente del lugar donde van a ser implantadas.